El sostenido e imparable crecimiento del crimen en el Perú es consecuencia de la presencia y evolución del crimen organizado transnacional en todas las Américas desde Alaska a la tierra del fuego con modalidades inéditas, con un alcance social nuevo, con raíces económicas financieras y política transnacionales evoluciona, cambia y se adapta frente a la impotente acción de los gobiernos y de la policía.